Tenemos que hablar de Kevin

Desde que Kevin Durant abandonara Oklahoma para fichar por el mega equipo que ya eran los Golden State Warriors en julio de 2016, parece que tuviera que pedir perdón allá por donde pasa . Y lo que es peor, parece que él mismo lo hubiera interiorizado. Un sentimiento de culpa que ha terminado con la etiqueta de niño bueno con la que comenzó su andadura NBA y le ha llevado a heredar, en menor medida, el rol con el que Lebron James cargó algunos años: el de villano oficial de la liga. Menospreciado por llegar a reforzar a un equipo ya de por sí campeón y eclipsado por una estrella que se maneja como pez en el agua ante los medios, en las redes sociales y con un juego mucho más vistoso, Stephen Curry, Kevin Durant ha ido apartándose del foco mediático hasta definirse como un asesino silencioso que deja víctimas deportivas a su paso. Su nuevo estatus le ha fruncido el ceño, le ha traído no pocos problemas de encaje en la liga y llevado a cometer más faltas técnicas que nunca. A ve...